Los decretos son afirmaciones poderosas, que se deben trabajar conscientemente y en un estado de relajación suficiente.
De todas maneras se pueden empezar a trabajar sabiendo que las palabras crean la realidad, en un determinado nivel.
Nuestra actitud totalmente dispuesta a trabajar por ello, será lo que determinará su efectividad.
En correlación al trabajo 1 propuesto en el apartado de creencias, proponemos estos decretos:
- Soy UN SER que tiene un alma y una esencia divina.
- La espiritualidad me permite conectar con mi alma y esencia.
- Tengo todos los dones que mi alma necesita para expresarse.
- Me hago responsable de mi poder creador, sin buscar ningún culpable.
- Puedo crear y reinventar mi vida en el momento en que comience a trabajar en ello de forma consciente.
- Puedo conocer cómo crear el futuro que deseo.
- Soy merecedor de toda la abundancia. Doy lo mejor de mí mismo y el universo me lo devuelve multiplicado.
- Estoy abierto a que todo lo bueno venga a mí iluminando mi camino y mi actuación.
- Tengo un sueño que cumplir, que aportará beneficios a mí mismo y a los demás.